En estos tres años que llevamos desaparecidos del blog, quizás el acontecimiento más impactante han sido la vuelta de los primarcas al mundo del 40k. En la línea argumental de la Herejía de Horus, Forgewold lleva sacando un tiempo miniaturas de Primacas increibles. Sin embargo, desde mi punto de vista, el alto de precio de Forgeworld, y el mostrar a los Primarcas durante los actos de la Herejía, impedían universalizar las figuras y presentarlas como esquema fundamental de la compañía.
Con los últimos sucesos en el trasfondo de 40k como el Gathering Storm o la vuelta de los Mil Hjios, GW ha aprovechado para crear tres grandes sucesos en torno a los tres Primarcas que ha liberado.
Debido a los sucesos del Wrath of Magnus, un ejército de Caballeros Grises y Lobos Espaciales consiguen defenderse de un ataque de los Mil Hijos con Magnus a la cabeza. Este suceso de trasfondo fue aprovechado para, en primer lugar sacar la miniatura de Magnus, y en segundo lugar, las miniaturas del ejército de los Mil Hijos, excusa que fue aprovechada para también en la misma jugada sacar la nueva versión de Ahriman. GW hace muy bien el pim pam pum bocadillo de atún y hacer un suma y sigue con sus novedades.
Como evento de trasfondo lo ví algo soso. Es decir, que todo cambie para que en realidad todo siga siendo lo mismo. Nada ocurre en realidad. Pero como evento comercial fue magnífico. Ahriman como miniatura es increíbles y el ejército de los Mil Hijos una pasada. (otra entrada hablaré de las nuevas minis de los héroes clásicos del Caos). Magnus como mini es....ni fu ni fa. Poca mantequilla estirada en mucho pan como diría Bilbo. Es la sensación de un gran muñeco que, desde mi punto de vista, cuesta sacarle valor como miniatura, más allá de los seductor qué es el trasfondo.
El siguiente en salir fue Guilliman creo recordar. Con el Gathering Storm para dar un avance al trasfondo. (que de nuevo no pasa gran cosa. Cadia cae y ya está) Sin embargo aprovecharon para sacar los triunviratos (de nuevo el pim pam pum bocadillo de atún) que son para mí miniaturas alucinantes. La vuelta de Guilliman sin embargo requería algo más, y por fin GW se atrevió a hacer lo que muchos aficionados ya reclamaban desde hacía tiempo: los marines True Scale o los Primaris como se llaman. Muchos jugadores ya conversionaban True Scale y muchas empresas de pintados de ejércitos las ofrecían en sus ofertas. Es decir, resolver el problema trasfondístico de porqué un Marine es tan alto o menos que un guardia Imperial. Esto también ha servido en el suma y sigue de GW de renovar toda la gama de Marines que también parecía ya poca mantequilla muy estirada. (veteranos y exterminadores eran ya variaciones pequeñas de minis ya hechas. Había ya poco margen para innovar). Vinieron los Primaris debido a Guilliman.
Como miniatura Guilliman me parece de lo mejorcito de GW. Una mini que creo, capta verdaderamente la grandeza de un Primarca y ha abierto la gallina de huevos de oro a este tipo de figuras.
El siguiente, y aprovechando la salida de la nueva caja de edición y la renovación de la Guardia de la Muerte ha sido Mortarion. Esa gran cosa barroca con alas.
¿Cuál es el futuro de los Primarcas en 40k? Inmenso. Tienen diecisiete Primarcas más, incluyendo los Purgados, que permiten que la salida de la mini de cada uno de ellos sea una apoteosis en el trasfondo que sirva además para sacar más novedades asociadas a ellos. En defnitiva, creo que en años sucesivos irán sacado cuidadosamente Primarcas, quizás uno al año o cada dos años para medir su efecto y lo que lleva asociado. De momento la salidad de cada Primarca ha supuesto un revulsivo miniaturil, no solo para la mini en si misma sino por sus ejércitos asociados (Primaris, Mil Hijos y Death Guard)
Larga vida a los Primarcas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario